martes, 11 de enero de 2011

Celos y Posesividad (ES)

En el artículo que escribí sobre Celos y la Teoría de Detección de Infidelidades Juanjo preguntaba en los comentarios: “¿Alguien me puede explicar clara y concisamente la diferencia entre celos y posesividad?”




La posesividad es el sentimiento de que algo te pertenece, un objeto, una persona. Por ejemplo, un esclavo. Consideras que esa persona es tuya y debe obedecerte. En este caso la posesividad sería un sentimiento o una forma de percibir dicho objeto o persona poseída.

Formaría parte de lo que se conoce en psicología como factores disposicionales. Es una disposición de la persona, quien no tiene que hacer nada específico para sentirla. Y tampoco es disparada por un acontecimiento exterior (tu pareja habla coqueteando con alguien) o interior (un pensamiento).

Esto puede venir por educación (había una época en la que tener esclavos o dominar a la mujer era aceptado socialmente y se transmitía de generación en generación), o de forma inconsciente provocado por la propia dinámica de la pareja. Si tú, por ejemplo, tomas el rol dominante y tu pareja siempre obedece, ambos os acostumbrais a eso. Mientras todo siga así, no hay problema de celos.

La posesividad en la pareja, puede llevar a los celos, cuando vemos que la otra persona, no solo, no nos obedece sino que se interesa por otra. Esa falta de control que tenemos sobre nuestra pareja, vivida de forma negativa y con ganas de recuperar el control a toda costa es lo que se suele denominar celos.

Es decir, los celos constituyen una respuesta emocional ante una amenaza o una pérdida percibida (real o imaginaria). La posesividad es un sentimiento estático y que dura en el tiempo, mientras que los celos pueden ser pasajeros, y son disparados por la situación psicológica.

Por situación psicológica debemos entender, no la situación física (lo que realmente está sucediendo), sino la interpretación que la persona hace de dicha situación física.

Los celos están asociados no solo a la posesividad, sino a la inseguridad. La persona no siente que es lo suficientemente buena para mantener a su pareja y percibe que se le escapa (en el caso de que haya también posesividad) o que ya no tiene más interés en continuar la relación y a cambio prefiere estar con otra persona, o haciendo otras cosas. En el momento en que intentamos hacer algo para recuperar a la otra persona, o nos afecta de manera negativa ese sentimiento de que prefiera algo o alguien antes que nosotros, estamos sintiendo celos.

Cuando aparece la pérdida de control de esa persona, entonces surgen los celos. Por tanto, puede haber posesividad sin celos, siempre y cuando no experimentemos esa pérdida de control sobre el otro.

La forma en cómo interpretamos unas situaciones como activadoras de celos o no, depende mucho de nuestra forma de ver las cosas, o en palabras más técnicas, de los constructos crónicamente accesibles que tengamos.

Por ejemplo, si tu pareja recibe una llamada telefónica de alguien y no te dice quién es, te puedes poner celoso pensando que está siéndote infiel con alguien. La infidelidad sería un constructo crónicamente accesible en tu caso. Ya hemos visto que una forma de hacer crónicamente accesible la infidelidad es siendo uno mismo infiel, tal y como explicaba en la entrada "Creía el ladrón que todos eran niñas repelentes".

Según las investigaciones en psicopatología, la celopatía (dudas y sospechas patológicas respecto a la fidelidad del compañero/a sexual) se da muy frecuentemente en hombres dependientes, con impotencia o alcoholismo.

No sé si esto responde a tu pregunta, pero básicamente y haciendo un resumen:

  • Los celos son una respuesta emocional ante una amenaza o una pérdida (imaginaria o real), mientras que la posesividad no. La posesividad es simplemente el sentimiento de que algo o alguien te pertenece.
  • Por tanto si algo amenaza con quitarte una persona que tú sientes que posees experimentarás celos.
  • Puede haber posesividad sin celos, aunque los celos sin posesividad son poco frecuentes.

3 comentarios:

  1. Completamente de acuerdo!!de la misma forma que los celos al contrario de la creencia popular no son una manifestación de amar MAS.Muy al contrario son mas una reacción animal que una acción del corazón.
    Cuando se AMA,ciertamente se poseé al otr@ pero se esta dispuesto a renunciar , a ceder, a dar, en virtud de un adorar que no se difumina ni siquiera cuando pensamos que no somos el hombre o la mujer adecuada para el o ella
    El Amor es humildad, los celos son instinto animal de un ser que se transforma en la mayoria de las veces en irracional!!
    Un saludo , me encanta tu entrada!!

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  2. Sabes que en persona pareces más joven?

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  3. Estoy de acuerdo Roberto, aunque un poco de resquemorcillo es perdonable y natural. Me quedo con la última frase de Alen: Puede haber posesividad sin celos, esta situación sólo dura hasta que el poseido despierta y se quiere liberar, entonces empieza el problema.

    Por cierto, los celos fraternales, laborales...también podrían explicarse de este modo no?

    Saludos

    Esteban

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