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En un post anterior Frank Romeo me preguntaba cómo evitar los celos en una relación a distancia.
En un post anterior Frank Romeo me preguntaba cómo evitar los celos en una relación a distancia.
En primer lugar, me gustaría hablar de la importancia de la distancia y la forma en que afecta a las relaciones en general.
Tenemos la tendencia a relacionarnos más con las personas que están más cerca de nosotros. En la oficina, en la escuela, incluso en la casa de Gran Hermano, las personas que están más cerca tienden a interactuar más y esa interacción da pie a muchas otras cosas. Nuestros amigos son probablemente personas que hemos conocido en nuestro entorno próximo. Los estudios de investigación muestran que la mayoría de la gente elige como pareja a alguien que vive cerca (o por lo menos en la misma ciudad). En el colegio o la universidad lo más probable es que nos hagamos amigos de los estudiantes que se sientan junto a nosotros, y si ya somos amigos con alguien antes de entrar a una clase, es probable que nos sentemos juntos en el aula.
Se han llevado a cabo numerosos experimentos de psicología social para observar cómo la distancia influye en las relaciones. Tenemos que distinguir entre:
- Distancia física: es el número de metros que se interponen entre dos personas.
- Distancia psicológica: lo cerca que te sientes de alguien o algo.
Una cosa a tener en cuenta es que la distancia física y psicológica se afectan entre sí, como ya he mencionado anteriormente. Tendemos a acercarnos a las personas que sentimos más cercanas y a alejarnos de la gente que no nos gusta o que no tienen nada que ver con nosotros. Sin embargo, lo contrario también es cierto. La psicología explica este fenómeno mediante la sensación de familiaridad que tenemos por las cosas que vemos con más frecuencia.
El Efecto de la Mera Exposición
El efecto de la mera exposición explica la tendencia a desarrollar sentimientos más positivos hacia los objetos y las personas a las que estamos expuestos repetidamente. No es necesario que haya interacción con el objeto o persona, ni tampoco que se tenga algún tipo de creencia o expectativa al respecto. Además también sucede a nivel subliminal. Un experimento clásico sería come el siguiente:
Se muestran varias figuras geométricas en una pantalla durante dos milésimas de segundo cada una. Los participantes desconocían las figuras. Más tarde se les presentó una lista de figuras (algunas eran nuevas y otras se habían presentado ya, aunque subliminalmente) y se les pidió que señalaran qué figuras habían visto antes durante la proyección. Nadie pudo identificar ninguna de ellas y simplemente respondieron al azar.
Sin embargo, a otro grupo se le pidió que escogiera entre las figuras presentadas aquellas que prefería o le gustaba más, y ¿adivina qué? Eligieron más las que se habían presentado antes, aunque ni siquiera habían sido conscientes de ello, como se demostró en la prueba de recuerdo que realizó el otro grupo.
Las implicaciones de este hallazgo fueron considerables y de gran alcance. Sugirió que la familiaridad va en contra de lo que dice el viejo refrán, la ausencia hace crecer el cariño. Parece que, simplemente, cuanto más vemos algo, más nos gusta.
Queda claro, por tanto, que en las relaciones a larga distancia, tarde o temprano hay que hacer desaparecer dicha distancia. Por lo tanto, Fränk Romeo la pregunta que necesitas hacerte es "¿cuáles son las posibilidades de reducir la distancia entre tú y tu pareja en el futuro?" "¿Qué puedes hacer al respecto?" Si no la distancia física, por lo menos la distancia psicológica debe ser reducida. Hoy en día gracias a Internet, Skype y el teléfono móvil nunca ha sido más fácil mantener el contacto con personas que viven lejos.
Sobre los celos
En cuanto a los celos, como ya comenté en una entrada anterior, la mayoría de las veces son una proyección de los propios deseos de ser infiel que tiene la persona celosa. Si alguien coquetea con otras personas, hace nuevos contactos por Internet, habla en chats donde la gente se entra para buscar, etc, se formará un constructo crónicamente accesible en torno a esa cuestión, que se proyectará sobre la pareja actual. Así es como se perciben motivos de celos donde no los hay.
Otro origen de los celos, son los causados por una sensación de inseguridad en uno mismo a menudo relacionado con una baja autoestima. También existen los celos en forma de comportamiento obsesivo compulsivo, pero esta modalidad debe ser abordada con la ayuda de un profesional.
En cualquier caso, los celos no son un sentimiento sano y hasta pueden convertirse en una profecía autocumplida, alejando a tu pareja y acercándola a otra persona que la comprenda mejor.
Lo primero que debemos preguntarnos es cómo nos sentiríamos si nuestra pareja se comportara como lo hacemos nosotros en cuanto a ligar y a conocer a otras personas (¡o a ser infieles!) Y tal vez hayamos encontrado ya la respuesta a nuestros sentimientos de celos.
Teoría de Detección de Infidelidades
Una amiga mía rompió recientemente con su pareja porque encontró en el cubo de la basura una prueba de que su pareja le había sido infiel. Ella se fue de vacaciones unos días y cuando regresó se encontró con un envoltorio de un condón en la basura. Se lo mostró a su novio y le preguntó qué es lo que había pasado. Él lo negó todo (¡por supuesto!).
Si confrontas a tu pareja con una prueba de infidelidad y él o ella lo niega, sólo tienes dos opciones: creer lo que dice tu pareja, o no hacerlo y actuar en consecuencia, pero discutir repetidamente sobre ello, no lleva a buen fin.
La Teoría de Detección de Señales estudio la capacidad de las personas para discernir entre una señal y un fondo de ruido. Todos los días tenemos que tomar decisiones sobre sucesos ambiguos o que presentan cierta incertidumbre como, por ejemplo, "¿Eso que suena es mi teléfono o es uno que sale por la televisión?", O "¿Está diciéndome la verdad la persona que me está hablando?" La Teoría de Detección de Señales (TDS) crea un modelo matemático sobre cómo las personas toman decisiones acerca de eventos inciertos. Voy a poner un sencillo ejemplo de un experimento psicológico sobre memoria.
Te presentan una lista de 10 palabras y te dejan 1 minuto para estudiarlas. Seguidamente te dan una segunda lista con 50 palabras sobre la que tienes que identificar las palabras de la primera lista marcándolas con un círculo. Por lo tanto, debes detectar qué palabras son conocidas (señal) de las palabras que son totalmente nuevas (ruido).
Sabes que habrá un máximo de 10 palabras conocidas en la lista de 50. Supongamos que haces un círculo alrededor de 8 palabras que crees habían aparecido en la lista anterior, pero sólo 7 de ellas son realmente de la primera lista y 1 es una nueva palabra que has confundido con otra palabra de la lista que estudiaste. También has dejado 3 palabras sin identificar porque no estabas seguro de si estaban o no en la lista.
- 7 son los llamados aciertos (respuestas correctas)
- 1 es una falsa alarma (una respuesta que creíste que era correcta, pero que no lo es)
- 3 son fallos (respuestas correctas que no has sabido identificar)
- 39 son rechazos correctos (las otras palabras que no marcaste, ya que sabías que eran nuevas y no se habían presentado en la primera lista)
Respuesta “estudiada" | Response "palabra nueva" | |
Palabra estudiada | 7 (aciertos) | 3 (fallos) |
Palabra nueva | 1 (falsas alarmas) | 39 (rechazos correctos) |
Aplicando esto a las infidelidades, la teoría de detección de señales mide la capacidad de distinguir entre una prueba de infidelidad (la señal) y cualquier otra conducta que no sea una infidelidad, aunque pueda parecer que es así (ruido), por ejemplo, si tu pareja se queda trabajando hasta altas horas de la noche en la oficina. Según la teoría, hay una serie de factores psicológicos que influyen en nuestros niveles de umbral de detección: la experiencia previa (por ejemplo, los constructos crónicamente accesibles), las expectativas, el estado fisiológico (fatiga, por ejemplo), y muchos otros factores.
Sensibilidad o discriminabilidad
Conceptualmente, la sensibilidad se refiere a cuán fácil o difícil es detectar un estímulo objetivo sobre el ruido de fondo. Por ejemplo, en la prueba de memoria anterior si hubieras tenido más tiempo para estudiar las palabras de la primera lista, habría sido más fácil reconocerlas más tarde. Es decir, el tiempo de estudio habría aumentado tu sensibilidad. Por el contrario, tener que recordar 30 palabras en lugar de 10 hace más difícil la discriminación.
Sesgo
Imagína la siguiente situación: tienes un niño pequeño en casa e instalas una alarma contra incendios, probablemente prefieras que el sensor tenga una alta sensibilidad, incluso si se dispara debido a una falsa alarma, porque el daño que puede causar un fallo en la detección es mucho mayor que dar una falsa alarma.El sesgo es el grado en que es más probable dar una respuesta que otra. Es decir, un individuo puede ser más propenso a responder diciendo que un estímulo está presente, (que viene el lobo, que viene el lobo) por lo que el número de falsas alarmas se incrementará, o es más propenso a responder que un estímulo no está presente, por lo que el número de fallos se incrementará. El sesgo es independiente de la sensibilidad, lo que significa que puedes detectar algo y decidir dejarlo pasar. Si te penalizan por dar una falsa alarma o por dar un fallo, esto seguramente influirá en el sesgo.
En el caso de las infidelidades, podemos distinguir dos tipos de sesgos:
- No confrontativos: Estas personas pueden evitar enfrentarse a su pareja si detectan una "señal" de infidelidad, por miedo a las consecuencias. Son más propensos a responder que la señal no está presente, por lo que realizará más fallos.
- Celosos: Estas personas, por el contrario, verán "señales" de infidelidad en todas partes. Son más propensos a responder que la señal está presente y por lo tanto aumentarán el número de falsas alarmas.
La Psicología estudia por qué ocurren estos sesgos, y eso es lo que, Frank Romeo, necesitas hacer también.
La pregunta no es qué hacer para evitar el sentimiento de los celos, sino más bien aprender a reconocer ese sentimiento e investigar por qué sucede. ¿Es porque coqueteas con otras personas y proyectas eso en tu pareja? ¿Es porque la infidelidad se ha convertido en un constructo crónicamente accesible que te hace ver signos de infidelidad cuando en realidad se trata tan solo de falsas alarmas? ¿Es debido a que necesitas mejorar la comunicación con tu pareja, porque tal vez no hayas hablado el tema de los celos y la infidelidad aún? ¿O es porque tu pareja te da auténticos indicios que cualquier persona interpretaría como signos de infidelidad?
Cualquiera que sea la razón, te deseo que encuentres la mejor en la solución para este asunto. ¡Ánimo y buena suerte!
mmm wenas.. mira que he tenido oportunidades para ser infiel.. pero.. no lo he sido, motivos.. xk solo veo la cara de esa persona en la pesona que puedo ser infiel.. y no puedo seguir con esa idea.
ResponderEliminarCierto es que la distancia se mitiga con las videoconferencias, el movil, etc... pero no es lo mismo ni la misma sensacion que tener a alguien cerca.
A veces hay signos o señales de dudas cuando alguien te deja de hablar por un tiempo, no se conecta, no envia un sms o cosas similares, y te quedas pensando que ocurre...
Otras veces ves en el msn sus nuevos contactos, las actualizaciones de algun contacto que ha añadido y te quedas con la duda razonable.. vale, pueden ser amigos pero... ahi esta la duda. no?
Los celos no quieren decir que no ames o desconfies, quizas quieren decir que tienes miedo a perder a alguien a quien quieres de verdad y que pensabas que no ibas a encontrar, en ocasiones te preguntas, si mereces a esa persona y te dices, igual es hora de dejarle para que no me afecte perderle...
y si.. pronto estaremos juntos eso no lo dudo.. xk lo necesito y necesito despejar dudas.
Fränk Romeo.
No voy a entrar, no voy a entrar, no voy a entrar (Asiercillo teatralizando)
ResponderEliminar1)¿Infiel o desleal?
¿Preferimos qeu tengan sexo con otras personas o que se enamoren sin tocarse?
2)¿No alargamos las relaciones más allá de su fecha de caducidad o de consumo preferente?
3)Llegados a ese punto, ¿lo lógico no sería replantearse la relación?
4)Empatizar está bien, pero no puedes pensar ni sentir como el otro, estás eliminando el individualismo de la persona.
5)Fränk, mi consejo (sin conocer tu situación al detalle), es que si la cercanía llega en breves, tengas calma.
¿Sólo se pueden tener celos de una pareja?
ResponderEliminarYo ejke no soy celoso. Tuve una vez celos y me quede tan sorprendido de descubrir que eran celos que se me paso de golpe. Desde entonces mi racionalizacion de las cosas me ha alejado bastante del problema
ResponderEliminarJealousy is stupid. Just like the whole idea of ''belonging to someone'' is stupid. No one belongs to anyone. Your love toward a person should not depend on his/her love for you (or the lack of it). If you really love someone, then you don't want this person to suffer, if you're in a long term relationship this would mean it's okay for her/him to sleep with others because 1. sex is important (if it's not, become a priest or a nun); 2. having sex with someone does not necessarily mean this person ''betrayed'' you; 3. everyone can do whatever they want, no one is no one's property.
ResponderEliminarPuntualizar que se puede confiar y confiar, pero cuando se ve una evidencia, y se confirma, entonces se investiga, y ahaaaa resulta que habia mil mas de las que eramos ciegos hasta encontrar la primera.
ResponderEliminarTodo esto sumado a que hay gente realmente incomprendida que esta con otra sin motivo aparente y siendo infiel hasta que tiene otra cosa agarrada, a estos yo los llamo cobardes, porque no merecen ni insultos..
El facebook aumenta los celos si... pero también te da nombres y te pone caras
Hola a todos, los celos tienen todos los orígenes que comenta Alen, pero yo voy a entrar en la parte animal de las personas. Según estudios sobre la competencia espermática en animales (en humanos puede o no darse, en ello andan los expertos peleándose), tanto machos como hembras buscan los medios para mejorar o aumentar la transmisión de sus genes. Los machos repartiendo semillitas (aumenta la probabilidad de éxito) y las hembras buscando mejor genética en los machos vecinos (aumenta la probabilidad de tener hijos sanos). En el caso de los humanos se añade un nuevo factor, pues los hombres tienen celos porque necesitan asegurar que los hijos que mantienen son suyos y la mujeres tienen celos porque necesitan asegurar el sustento que le aporta el padre. En ambos casos es un reflejo de la supervivencia genética. En otros casos (parejas que no van a tener hijos, celos entre hermanos...), supongo que es lo mismo, pero la causa varía. En algunos casos pueden seguir siendo los recursos económicos, pero en otros puede ser la inversión de tiempo. Diriges un tiempo y un esfuerzo hacia una persona que te sale rana...inversión perdida; por lo tanto, con los celos enciendes la alarma que hay en ti para no perder todo lo invertido. Supongo que todo se ve aumentado si además entra el factor distancia.
ResponderEliminarEn cuanto a la pregunta 1 de Asiercillo, creo recordar que leí en alguna parte que las mujeres son dadas a tener más miedo a que haya sentimientos de por medio de que los hombres. Quizás por el mismo motivo, que tu marido tenga una relación sexual esporádica no implica que se vaya de casa, pero si se enamora de otra… el aporte de recursos del macho para la cría de la prole probablemente se vaya o se reparta en la camada de otra. En definitiva, somos bichos, sociales, pero bichos y nos comportamos como tales.
Saludos, Esteban
Hola Esteban:
ResponderEliminarMuy interesante tu aportación sobre psicología evolutiva. Existen muchas explicaciones basadas en la teoría de la evolución de las especies para entender el comportamiento humano. Muchos de nuestros impulsos agresivos, de afecto, etc. son fruto de la evolución, así como el hambre y la tendencia a engordar :o)
Como dato interesante me gustaría añadir que el macho de algunas especies cuando se empareja mata a las crías que no son suyas, de esta forma se asegura que son sus genes los que se transmiten y no los de otro. Esto lo hacen, por ejemplo, los leones. (Me encanta exponer este caso cuando alguien se queja de la brutalidad humana y se le ocurre hacer una comparación con el reino animal diciendo algo así como: "los animales no matan a los de su misma especie"... jeje ... )
Evolutivamente, la monogamia no tendría mucho sentido para el macho, ya que lo más interesante para él sería extender sus genes con tantas hembras como pueda.
No obstante, lo que nos diferencia a los seres humanos es la cultura. Por eso, si conocemos y entendemos nuestros instintos animales, podemos aprender a "controlarlos", como en el hipotético caso de que tengamos el impulso de matar a los hijos que nuestra actual pareja haya podido tener en un matrimonio anterior, o como bien comentas tú, en caso de sentir celos por el miedo inconsciente a perder la inversión realizada en una pareja. ¿No crees?
Hola de nuevo,
ResponderEliminarMi directora de tesis propone la teoría del Homo prunus (hombre melocotón). Con ella compara al ser humano con este fruto, por un lado el hueso sería la parte animal que todos tenemos y por otro lado, la pulpa sería la cultura. Esta pulpa es más o menos gruesa en función de lo compleja que sea dicha cultura, pero siempre pueden darse mordiscos que dejen ver esa parte animal. Con esto vengo a decir que gracias al aprendizaje y a la ley (para los que no aprenden a controlar los impulsos) podemos diferenciarnos del resto de animales. Aún así creo que muchos de nuestros comportamientos pueden verse también en la naturaleza.
En cuanto a los celos, por supuesto que estoy de acuerdo con que la proyección de nuestros actos o la inseguridad influye de manera decisiva en este sentimiento, pero con estos hechos no quedarían explicados otro tipo de celos (entre hermanos, por ejemplo). Me he preguntado dónde estaba el origen y he vuelto a llegar al mismo punto (jeje). Desde mi punto de vista el origen está en el temor a perder algo tuyo, algo es tuyo cuando inviertes algo en tenerlo (no sólo dinero, sino también tiempo y dedicación) o lo sientes tuyo (una herencia o el cariño de una madre), por lo tanto el origen de los celos puede ser el miedo a perder una inversión o un beneficio. Al menos, la evolución cultural ha hecho que no sólo nos preocupe perpetuar nuestro genoma jeje.
Por último se me plantea una cuestión ¿Qué pasa con las parejas abiertas? ¿Desde el momento en que las relaciones extraconyugales no se ven como algo negativo desaparecen los celos? Según lo que vengo argumentando se me ocurren dos posibilidades:
1º Estas personas no experimentan el sentimiento de propiedad, por lo tanto nada tienen que perder.
2º ¿Podríamos tener una combinación de agentes (culturales y naturales)? Es decir, ¿podría este sentimiento derivar de un comportamiento ancestral y verse iniciado e incrementado por factores culturales?
Saludos, Esteban.
Pd: quería darte las gracias porque tu blog me está permitiendo pensar en algo muy diferente al tema de mis investigaciones. No soy psicólogo (disculpadme si meto la pata por desconocimiento de la disciplina), pero me estoy divirtiendo tratando utilizar la lógica y mis conocimientos sobre fauna para intentar explicar conductas humanas.
Me parece muy buena la parte de los celos jeje, yo me considero celoso y quizas sea cierto que es porque yo se que podria ser infiel, entonces tengo miedo que mi pareja lo sea, ahora no tengo pareja pero me ha pasado muchas veces.
ResponderEliminarun beso y muy bueno el articulo
Por cierto espero que sepas quien soy te mando un saludo desde cantabria espero conocerte en persona algun dia jeje
Alguien me puede explicar clara y concisamente la diferencia entre celos y posesividad?
ResponderEliminarCan anyone out there describe clearly and to the point the difference between jealousy and possessiveness?
Hay detectores de infidelidades efectivos que se comercialicen legalmente?
ResponderEliminarBuenas,
ResponderEliminarHa sido muy interesante llegar hasta aquí, muchas gracias a tod@s l@s presentes fantasmagóric@s jaja.
Concordando con los intereses y devenires de algunas, no se me había ocurrido leer el artículo desde una perspectiva animal/zoológica/reproductiva, ya que, como dice la compañera de la tesis (espero que ya doctora) la adquisición de la cultura, que además se ha ido acomplejando con los años, distanciando, mutando, pasado por márketing fundido, envuelto en látex, etc. que considero que sólo en cierta medida estamos pensando en la perpetuación de nuestros genes cuando tenemos celos o miedos** de nuestras parejas, digo yo. Aunque inconsciente/químicamente ya no me atrevo a entrar, me parece un contraste de escalas muy grande y aún distorsionado. -Cómo actúan en nosotros los químicos cerebrales-hormonales, haciendo que reaccionemos de forma correcta respecto a nuestra pareja, es decir, evolutivamente preservada por válida: mantenemos a la pareja y deseamos reproducirnos con ella. Y cuánto no manda la cultura adquirida, hoy día la de la no-concepción-por-favor, o más fácil, la cultura del aborto, de alguna manera.
Creo también que hace ya mucho, filogenéticamente hablando, que contamos con la emoción del amor, que nos lleva a cuidar de nuestr@s semejantes, e involuntaria o interesadamente también a lus diferentes, mucho más de lo que los hemos venido dañando, evolutivamente hablando. Y sino habría que ver con qué especie(s) se compara. Yo te voy a poner el ejemplo de los elefantes, porque es de mis más más favoritos.
En la medida en la que tratamos de mono-poligamia como estrategia evolutiva, yo diría que ésta depende de un viraje muy sencillo en el comportamiento, sobre todo de los machos de las comunidades, pues suelen ser finalmente más fuertes si se ponen, no sé si diría que más fieros, eso dependerá de la leona. Quiero decir, que de una generación para otra pueden ir cambiando este comportamiento a la hora de aparearse.
En alusión también a las preguntas de qué pasa cuando rompemos con lo monogámico, cambiamos la pregunta:
Cómo tomarse las relaciones íntimao-sexuales en la vida? Porque NO PERTENECEMOS A NADIE. Esa es la verdad que tenemos que asumir en esta era. Ni a tu padre, ni a tu madre, ni al estado, ni a tu pareja, ni al vecino, ni al jefe, ni al caballo(heroína)... lo de Buda/Yisus/Alá/Krishna/Ra lo dejamos en manos de cada cual, yo al menos, mientras que no sea perjudicial para otros ecosistemas, incluido el de la propia mente del/a individu@ y su desarrollo como persona libre.
The point is: La proporción de dependencia que depositamos en otra persona, o al revés. Hablo de una dependencia básica que siempre existirá. Hace falta sentir que cuentan contigo, y por supuesto, que puedes contar con otra persona; y en la medida en la que se den esas tres cosas de las que hablaba en otro post sobre una teoría del amor completo= pasión, intimidad y compromiso; y con la que estuve de acuerdo. Todo esto es hermoso en esencia, pues significa el ofrecimiento a otra persona que amas naturalmente. Y también se puede dar en la amistad, quitando la pasión en un concepto básico o no poliamoroso.
El tema es EN QUÉ MEDIDA contamos o se cuenta con nosotr@s y para qué. Siendo esto un generador de compromisos en sí mismo, según el grado de posesividad o dependencia que se tenga hacia la otra persona.
¿En qué medida se le puede pedir o esperar lo mismo por ambas partes, si estas son intrínseca y hermosamente distintas.
¿En qué medida se tiene que avanzar asumiendo compromisos, el uno por el otro, y en qué medida esto es o no necesario para trazar, planear en común, acabar con ese destierro entre las dos personas. Yo creo que así no aguanta nadie mucho tiempo, es natural, aunque me jode asumirlo a la inversa. O no planeamiento en común, y entonces cómo? qué? paté!
Bueno chau
¡Gracias!